En busca de la berrea del ciervo en el Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas

Antonio Mudarra
Antonio Mudarra

Si hay un acontecimiento único para disfrutar en otoño de nuestros espacios naturales ese es la berrea del ciervo. Un plan perfecto, familiar e ideal para pasar con amigos.

Todo un espectáculo que se repite año tras año, al comienzo de las primeras lluvias en muchos de los parajes naturales de nuestro país. La observación y escucha de la berrea en España ha ido ganando protagonismo y ha despertado el interés de muchos curiosos, que con afán sacan un hueco de su ajetreada agenda y se dan un respiro para ir en busca de este apasionante animal. Se puede realizar de muchas maneras, como por ejemplo en una ruta en 4×4.

Pero es, sin duda, la Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas, ubicada en la provincia de Jaén, uno de los lugares más emblemáticos del país para observar a este majestuoso animal. ¡Está reconocido entre los mejores Parques Naturales para observar la berrea! 

Te doy seis claves para vivir esta experiencia en este maravilloso entorno natural. ¡Sólo tendrás que coger tus prismáticos y agudizar tu oído!

#1 LA BERREA EN EL PARQUE NATURAL DE CAZORLA, SEGURA Y LAS VILLAS 

¿Por qué elegir a Cazorla, Segura y las Villas? 

La respuesta es muy sencilla. Piensa en el final del verano y en el comienzo del otoño. Llega la hora en la que el bosque se despierta, se agita y los colores cambian de tonalidad. La vida que hay oculta entre los bosques sale y todo cobra sentido en el ciclo animal. 

Dentro del mayor espacio protegido de España, existen grandes poblaciones de ciervos que con las primeras lluvias son los grandes protagonistas de un evento fascinante, coronándose entre los mejores lugares para observarlos. 

Por tanto, tu aventura comenzará en este espacio natural privilegiado con una inmensa cantidad de paisajes maravillosos. Al adentrarte en sus bosques podrás descubrir su gran riqueza ecológica: pinos, quejigos, encinas, alcornoques, madroños, jaras… 

Todos ellos, lugares de remanso y paz para miles de especies endémicas que coexisten entre sí. La fauna de la zona que cabe destacar son los jabalíes, los gamos, las cabras montesas, las águilas reales, los buitres leonados, y nuestro gran protagonista, el ciervo.

Lo cierto es que son muchos los lugares donde poder presenciar la berrea dentro del parque natural. Con esta ruta, podrás visitar los mejores puntos en una actividad única y acompañada de guías expertos.

#2 EN BUSCA DE LA BERREA

Es durante las primeras lluvias de septiembre cuando el ciervo macho comienza a berrear. Como por arte de magia, todo empieza a resurgir.  Para que te pongas en situación, es el momento en el cual, los machos se pasean con altanería por determinadas zonas con el único objetivo de deleitar a las hembras de la manada. ¡Ni que decir que estas sucumban a sus encantos!

De esta forma, la berrea es la forma que tienen los machos de emitir potentes bramidos con el fin de llamar la atención de las hembras de la manada para conquistarlas. Antes de su conquista, los machos se enzarzan en una lucha mítica para ver quien es el merecido ganador. Durante este período, machos y hembras, que han permanecido separados durante largos períodos de tiempo, empiezan a convivir. 

Esta época del año es la más importante en la vida de esta especie de mamíferos, ya que, de ella dependerá el futuro y la perpetuación en el tiempo de su especie.

Otro aspecto interesante es que los machos llevan una vida mucho más solitaria, viviendo aislados o rodeados de no más de cuatro ciervos. Las hembras, por su parte, llevan una vida social más activa. Viven en manadas formadas por decenas de hembras y conviven con los cervatos o gabatos (ciervos pequeños que aún no tienen cornamenta), con el fin de protegerlos de cualquier depredador o amenaza hasta que cumplen el primer año y desarrollan los primeros cuernos, que pasan a denominarse varetos o estaqueros. ¿Curioso, verdad?

Por otro lado, los machos han estado todo el año preparando sus cuernas para este momento. Al principio, comienzan a crecer y se recubren de una piel aterciopelada, a la que denominaremos borra. Ésta es la que va a llevar el riego sanguíneo a los cuernos que le va a ayudar a crecer y los protegerá en su estado más vulnerable.

Una vez que las cuernas están fuertes y desarrolladas por completo, borra comenzará a desprenderse del cuerno. Éstos están perfectamente creados para empujar y no para herir. Una vez tienen su cornamenta lista… ¡Comienza la batalla! 

#3 FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE

¿Quién no ha encendido la tele alguna vez y ha escuchado la inconfundible música al comienzo del episodio del “Hombre y la Tierra”? ¿Recuerdas aquella voz pausada y ronca de su presentador?

Félix Rodríguez de la Fuente fue el mayor exponente público que defendió y dio a conocer El Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas. Pasó gran parte de su vida dedicada a filmar y estudiar las especies que lo habitan. 

Se licenció en medicina y fue autodidacta en el ámbito de la biología. ¡Ojo! Esto no le impidió demostrar su carisma y pasión por los animales salvajes, llegando a realizar grandes observaciones del lobo ibérico.

Entre todos sus grandes logros destacados está el llevar a casa de todos un poco la naturaleza, gracias al mítico programa español “El Hombre y La Tierra”, retransmitido entre los años 1974 y 1980.

Algunas de las escenas recopiladas en el capítulo titulado Los Señores del Bosque dedicado a Cazorla, Segura y Las Villas y a la berrea, aparecen en algunas de las paradas que realizarás durante tu ruta para la escucha de la berrea: los Llanos de Bujaraiza; la Isla Cabeza de la Viña; o el Collado del Almendral.

La prueba del reconocimiento de Félix y su relación con el parque natural está en el Mirador de Félix Rodríguez de la Fuente, uno de los más conocidos y transitados. 

#4 POBLADO DE BUJARAIZA E ISLA CABEZA DE LA VIÑA

Otro de los enclaves perfecto para escuchar la berrea dentro del parque natural es el poblado de Bujaraiza (uno de los grandes misterios que se oculta en la Sierra de Segura). 

Bujaraiza era una aldea que vivía con un modo de vida muy peculiar. Sus vecinos, que dedicaban grandes esfuerzos durante toda su vida para poder vivir, eran capaces de autoabastecerse gracias a la agricultura y a la ganadería que se desarrollaba en el lugar.

Aunque era una aldea bastante rica en costumbres, el fin de esta población vino de la mano de la creación del embalse del Tranco. Los habitantes del lugar, se vieron obligados a abandonar sus casas y su historia, sepultando sus secretos bajo las aguas tranquilas del pantano, que hoy día cubre nuestra vista.

Aún hoy, podemos visitar las ruinas de Bujaraiza, imaginando cómo fue en años mejores. Allí se conservan las almas sagradas que descansaban en el cementerio del poblado junto con la Ermita de San Miguel. Algunos cuentan que, por las noches de invierno, a veces aún se escucha el repicar de las campanas de la ermita.

Paseando por los llanos de Bujaraiza, podemos observar como lo que antes era un monte que rompía la monotonía del paisaje, se ha convertido en una isla, llamada Isla Cabeza de Viña. Desde el poblado, te esperan unas magníficas vistas y un buen escenario para observar ciervos. 

#5 POR LOS MIRADORES DEL EMBALSE DEL TRANCO

El embalse del Tranco es el más grande de la provincia de Jaén. ¡De hecho llegó a ser uno de los embalses con mayor capacidad de toda Europa! 

A lo largo de todo su recorrido, podrás encontrar una gran diversidad vegetal endémica de ribera, que acompaña al paisaje acuático generando postales dignas de admirar en todo su esplendor.

Este, ofrece a sus visitantes una larga lista de miradores distribuidos por todo el embalse, generando así la posibilidad de observar el pantano y su gran belleza desde muchas perspectivas diferentes, sin dejar ninguno de sus rincones ocultos. Durante mediados de septiembre y octubre, se han convertido en los mejores puntos para escuchar la berrea en todo su esplendor. Mira esta experiencia de 6 horas de duración, con paseo en barco y con aperitivo incluido.

Uno de los más emblemáticos de la zona por su importante valor histórico es el Mirador de Control Viejo, muy cerca del Centro de Ocio El Tranco y donde se realizaban los registros de paso de todos pasajeros que accedían, por un motivo u otro, a este paraíso interior.

Te recomiendo dar un relajante paseo en barco solar por el embalse, mientras observas aquellos ciervos que tímidamente se pasean por sus orillas.

#6 RECORRIENDO LA RUTA DE FÉLIX RODRÍGUEZ DE LA FUENTE

Por último, no me puedo olvidar de la célebre ruta dedicada a nuestro queridísimo amigo Félix. Tiene una longitud total de 20 km de recorrido y se inicia en el propio mirador de Félix, llegando hasta la pedanía de Coto Ríos y bordeando la parte sur de la isla Cabeza de la Viña.

Dentro de la propia ruta, encontrarás algunos de los miradores del embalse del Tranco y otros puntos clave perfectos para pararse a escuchar la berrea y a admirar unas impresionantes de la belleza de la fauna y flora del lugar.

Además de su rico valor ecológico y faunístico, esta ruta cuenta con un privilegiado valor geológico, donde el paso del tiempo ha quedado grabado en las rocas del paisaje e incluso, se puede llegar a apreciar el paso del agua por las mismas.

Si no puedes realizar la ruta durante la época de berrea no te preocupes, es una zona muy buena para poder observar ciervos durante todo el año. 

Es el otoño, una de las mejores épocas para conectar con la Madre Tierra. Tú, que eres todo un amante de los animales y el medio ambiente, lo tuyo son las actividades al aire libre ¡Y lo sabes!

Si aún no has escuchado los imponentes bramidos de los ciervos machos por todo el Parque Natural, la berrea del ciervo es tu oportunidad. Te garantizo que la Sierra de Segura es todo un paraíso natural que no puedes perderte. 

Déjate envolver por su encanto y vive esta experiencia en contacto con la naturaleza. ¡No dejes que te lo cuenten y reserva ya!

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